Bien, pues este blog se despide con todo el cariño.
Ayer dejé la isla y me volví a Madrid.
Tó el pescao vendío.
(y es que mi situación profesional, o al menos económica, no mejoraba).
Y la soledad tampoco ayudaba un pelo, hombre.
Puede que eche de menos aquella encantadora casita ante cuya fachada pasaba tantas veces...
Alguna cala predilecta agradable...
O el agua clara de la mañana.
Dejándome un mensaje en Braille.
Cordillera montañosa en mi muñeca.
O esa herida que me hice el otro día en la rodilla (también es puntería: justo en el mismo punto donde siempre tuve una señal de nacimiento).
(típico tropiezo entre las rocas...)
Ya va cicatrizando. Pero me quedaré sin dicha señal, o ya nunca será la de antes.
No quiero pensar en la simbología del asunto.
Sí, los viajes te cambian. Al menos en la piel.
En fin, que siempre podemos volver. Veníos una día y contemplaremos ese fulgor...
Ese mar plano como un plato...
...O bajo el embate del nadador.
Porque el mar es la cosa más viva que existe.
Y conviene contagiarse de esa viveza de vez en cuando. Dejarlo todo y tirarse.
(Uau, "Colinia Ibiza for Men"). |
MIL GRACIAS A TODOS LOS QUE ME HABÉIS TENIDO TANTA PACIENCIA Y LEÍDO, OPINADO, ANIMADO, CRITICADO, ALENTADO...
GRACIAS POR HABERME HECHO TANTA COMPAÑÍA DURANTE ESTOS SIETE CURIOSOS MESES.
(este blog también puede servir a quienes les interese visitar la isla, creo yo)
¡VOLVEREMOS!
¡Y NOS VEMOS EN MADRID! (O DONDE HAGA FALTA).